Siguiendo con la última entrada del blog, donde estábamos casi acabando nuestro proyecto de fabricación de un mueble tipo taquilla, os enseñamos en que punto habíamos dejado el trabajo, a falta de solucionar el tema del cerramiento.
Una vez creado el esqueleto del mueble, solo nos quedaba diseñar y crear
las puertas. Estuvimos dudando entre una puerta grande para todo el
mueble o dos puertas, una para cada uno de los huecos. Al final, viendo
que una sola puerta podía ser demasiado problemática, nos decantamos por dos.
Este tipo de armarios taquilla suelen tener una rejilla que se usa de respiradero
para que circule el aire en el interior, ya que muchas veces se guarda
ropa que puede estar húmeda, toallas u otros objetos que necesitan ser ventilados.
Como el uso que queremos darle es para guardar
documentos, libros, revistas, fotos, etc., no se necesita una ventilación real, por lo que, para facilitarnos la tarea, decidimos que la rejilla iba a ser falsa, es decir, abierta en el exterior de la puerta pero cerrada en el interior de la misma.
Aquí os mostramos el proceso de fabricación de la puerta con algunos detalles de la rejilla:
Para sujetar la puerta al mueble utilizamos una bisagra hecha toalmente de cartón:
Y por último se añadió el único elemento metálico del armario: las asas. Como no se podían atornillar al cartón por razones obvias, se utilizaron unos tornillos con tuercas para sujetarlas, consiguiendo la sujección máxima a la puerta:
Si multiplicamos por cinco el trabajo realizado, obtendremos el resultado final. ¿Qué os parece?. El proyecto ha llevado su tiempo, pero creemos que ha valido la pena.
Buenísima idea :0
ResponderEliminarNos alegra de que te guste : ))
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