El mundo del arte
ha cambiado mucho en los últimos años, y las nuevas generaciones de
artistas han aportado una visión más responsable. De ahí, que nos
encontremos con que numerosos creadores utilizan materiales reciclados
para generar sus piezas o elementos biodegradables.
Este es el caso del artista estadounidense Kiel Johnson, cuya obra se centra principalmente en el uso de este material. Empezó a trabajar con el cartón porque no tenía mucho dinero y quería
construir grandes piezas que atrajeran la atención del público.
Él mismo cuenta que su interés por lo hecho a mano le viene de familia. Su madre era muy aficionada a todo lo relacionado con la artesanía (crochet, costura, etc) y su padre trabajaba en una imprenta donde prácticamente todo se hacía de forma manual.
Él mismo cuenta que su interés por lo hecho a mano le viene de familia. Su madre era muy aficionada a todo lo relacionado con la artesanía (crochet, costura, etc) y su padre trabajaba en una imprenta donde prácticamente todo se hacía de forma manual.
Las
manos de Johnson resultan prodigiosas convirtiendo un simple componente
de nuestros objetos cotidianos en algo realmente increible. Solo hay que
observar la delicadeza con la que crea perfectas cámaras fotográficas
hechas con este material y a las que no les falta ningún detalle.
Tampoco se le resisten los instrumentos musicales, que los consigue hacer tan fieles a la realidad que podrían pasar por originales y nadie se daría cuenta.
Otras de sus obras son grandiosas maquetas de ciudades con calles, casas,
rascacielos y coches, ejecutadas con un gran nivel de detalle o la creación de personajes robóticos salidos de películas de ciencia ficción.
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